La víspera de la Batalla de Flores en Laredo es una noche especial, es la noche mágica, la noche de la flor y la ilusión.
Miles de personas visitan los talleres y “cuarteles generales” donde se realizan las carrozas y contemplan de cerca el trabajo de los carrocistas, donde curiosear cómo se colocan las miles de flores naturales y pétalos en cada una de las figuras de las carrozas que al día siguiente desfilaran en la Alameda Miramar en el concurso floral más importante de España.